Consulta y análisis de composición corporal
El Análisis de la Composición Corporal mide los diferentes componentes del cuerpo. Nuestro peso corporal es la suma de todos los tejidos del cuerpo y es considerado una medida antropométrica tradicional junto con la talla.
Con el peso y la talla podemos obtener el Índice de Masa Corporal (IMC), el cual se calcula al dividir el peso en kilos entre el cuadrado de la talla en metros (kg/m2).
Pero para un adecuado análisis de la composición corporal es fundamental delimitar los diferentes componentes del cuerpo, ya que los porcentajes pueden variar según el sexo, edad, nivel de actividad física, tipo de dieta y en ciertas enfermedades.
Tras la valoración nutricional se crea un plan de alimentación personalizado según tus necesidades.
La consulta y análisis de composición corporal incluye la evaluación de la composición corporal del paciente.
Para determinarlo existen múltiples métodos:
- Impedancia bioeléctrica: aporta gran información en pacientes desnutridos, así como en la valoración de los cambios corporales asociados al envejecimiento (sarcopenia) y los que se presentan en ciertas enfermedades como la diabetes.
- Identificar a los pacientes con aumento de la grasa corporal visceral: esta circunstancia supone un aumento de riesgo cardiovascular y diabetes.
- Evaluar los cambios corporales asociados a la pauta de alimentación, y el ejercicio físico.
- Evaluar pacientes en los que se sospecha que el índice de masa corporal es discordante con la masa grasa total.
- Un ejemplo son los deportistas donde el IMC puede ser alto pero con adiposidad baja. Sin embargo, también se puede presentar el caso contrario, en el que se puede tener un IMC normal pero un porcentaje de masa grasa en valores de sobrepeso u obesidad.
- Un exceso de grasa corporal se relaciona con la aparición de enfermedades como: Diabetes Mellitus, Hipertensión, Dislipidemias y enfermedades pulmonares. Y un bajo porcentaje de grasa corporal no siempre es sinónimo de salud, ya que la masa grasa forma parte de la reserva energética y en el caso de las mujeres es esencial para mantener un ciclo menstrual regular y saludable.
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